En la actualidad existe confusión entre dos términos dentro de la Seguridad Social, los cuales son la Asistencia Social y el Asistencialismo, procesos que en la práctica son casi lo mismo pero tiene un fin distinto.
La Asistencia Social la podemos definir como un conjunto de acciones que van dirigidas a las personas en estado de necesidad o de desprotección física, mental o social, en la que la intencionalidad de la mismas es coadyuvar al individuo para que se incorpore a su vida productiva.
Los Programas Sociales son presentados como una asistencia social que buscan brindar protección a las personas en estado de necesidad. Algunas de ellas tiene herramientas que permitir el desarrollo de nuevas habilidades y competencias para estos individuos, de no ser así pasamos al otro término.
El Asistencialismo se define con una situación de dependencia del individuo hacia el apoyo que el gobierno le ofrece a través de asistencia social, en el asistencialismo, no existe corresponsabilidad del individuo ni compromiso para desarrollar sus propias potencialidades.
Cuando se cae en el Asistencialismo la sociedad no es capaz de salir de la pobreza por sí misma, debido a que carece de competencia necesarias para el desarrollo de labores u oficios calificados que le permitan tener ingresos mayores a sus necesidades básica.
Como conclusión es necesario desarrollar programas bien estructurados que permitan el intercambio de prestaciones, por una parte el Estado otorga un beneficio y el beneficiario se compromete a brindar una contraparte.